ECUADOR

Un Tema MANEJADO...

por Juan Carlos Maimone

El reciente suceso acontecido en Ecuador, merece como es natural, un detenido análisis, desprovisto como debe ser, de falsos nacionalismos y de descoloridos  tintes políticos producidos por gobernantes tan oportunistas como advenedizos… 

Algo huele mal en Ecuador...

Si bien el país de la mitad del mundo fue precursor en su momento del retorno a la democracia después las álgidas dictaduras militares, no es menos cierto que junto con Argentina mantiene el galardón de ser anfitrión indiscutido de la mayor cantidad de presidentes depuestos desde la restauración del voto popular, lo que sin dudas, debe llamar a la reflexión, no al olvido.

Ya en la década de los 80, el populista Coronel Gutierrez, derroca al hasta entonces presidente Febres Cordero, aunque paradójicamente, es elegido por el voto popular y a la vez depuesto por los mismo que lo llevaron al poder (?). Dentro de este argumento histórico, lo sucedido en Ecuador, no nos puede llamar la atención, porque no ocurrió en Brasilia, Santiago o Montevideo, fue en Guayaquil.

Lo que sí reclama un fuerte razonamiento, apto sólo para pensantes, es que los que los presidentes latinoamericanos (incluyendo el jurista de la Casa Blanca) denominaron rápidamente al hecho, como Golpe de Estado. Nada más lejos de la realidad…

Lo sucedido en Ecuador, es claramente un Motín Policial y los guardianes del orden nunca estuvieron tan lejos de pretender tomar el poder. Ratifica lo expuesto el hecho de que en ningún momento aparece un líder definido, ni una solicitud de desplazamiento de las autoridades, ni ningún indicio que haga pensar en una revolución.

Es decir; el acontecimiento no puede llamarle la atención ni a Chávez, ni a Morales ni a los Kirchner, porque en sus respectivas republiquetas esto es de carácter cotidiano y la única diferencia, es que aquí se trató del personal más endeble de los uniformados, mientras que el ejército – que rescató al Correa de una manifestación – junto al resto de las Fuerzas Armadas, respondía a sus mando naturales.

Ortega, Chavez, Correa: Democracia..?

En otras palabras; ninguna diferencia con los “patoteros”, “indígenas” o “piqueteros”  que movilizan los gobiernos de Venezuela, Bolivia o Argentina cuando algo no encaja en sus intereses, pero con la diferencia que esto atentaba contra los caprichos de Correa. De allí que el político, se apuró en llamar Golpe de Estado, para que sus pares, clamaran con la misma velocidad por justicia.

Ninguna diferencia con la situación de Honduras, a la que los mismos mandatarios ante el derrocamiento de un casi delincuente que había profanado descaradamente la Constitución de su país, creando por ende lo que desde el punto de vista jurídico legal se conoce como Crisis Institucional, lo caratularon de Golpe de Estado. Pero atenuando los calificativos, por lo menos allí, se pedía la salida del presidente, aquí, nunca…

Qué Viva la Diferencia ..!

Golpe de Estado en Ecuador...

Derecho a expresarse en Argentina...

De esta tristemente célebre forma de actuar, los actores de la UNASUR, desnudan una vez más la inoperancia de sus administraciones, que sumieron a Sudamérica toda en el antro de corrupción jamás soñado por Bolivar o San Martín…